Dudó durante unos minutos si su compañero había perdido el juicio. Estaba planteando a Samanta llevarse a Silvia, al Ser de Niebla, con ellos al Averno:
- ¡No podemos secuestrarla así como así! ¡No es humana ya! Además… ¡Fíjate lo que te hizo, Tirso…!-.
Él no atendía a razones; casi prefería los momentos en los que no mentaba a Silvia, y estaba en estado de shock.
Sugería que después de aquel trasiego, el Ser de Niebla de Silvia habría ido a un sitio fidedigno para ella, seguramente al cementerio más cercano, al Camposanto de Santa Catalina, a dos kilómetros desde allí yendo hacia el Norte. Los cementerios le resultaban familiares, ya que en el de su pueblo era en el primero que se estableció con Tirso, desde que pasara confusa a otra dimensión.
- Antes de que yo mismo me convierta en un Ser de Niebla y no pueda discernir lo que está bien de lo que está mal, tengo que llevarla al Averno, a donde debe estar… Y nosotros dos no tardaremos en convertirnos en lo que Silvia es ahora… y deberemos estar allí -, conjeturaba Tirso.
Eran muy bonitas todas estas pretensiones… Pero no podía ser tan fácil capturar a un Ser de Niebla, aunque Sami estaba reflexionando en que quizá así sería más fácil dar con el camino al Averno.
Estaban convencidos de poder hacerlo, y se pusieron en marcha hacia el cementerio pensando que era lo correcto.
gracias pili pero no soy ejemplo de nada…somos diversos,diferente,las personas por suerte! ino ete mundo seria aburridiimo!!!!!!!
lei todo lo que me faltaba ah y por favor dejame cuaalquier comentario po e mail o en mi pagina,porque entrar a punto hispano me llevo tiempo por no recordar la contraseña
un abrazaso enorme.compañera
lidia
De nada, Lidia… Sólo he confirmado en escrito lo que pensaba…
Entendido, por mail o por tu página… Suele pasar lo de la contraseña. No sé si se podrÃa arreglar lo de Punto Hispano.
Un abrazo